Soledad Aller.
Dicen que los recuerdos los construimos nosotros/as mismos/as, dicen que si deseas con mucha fuerza los sueños se hacen realidad, y que si cierras muy fuerte los ojos volverás a aquel rincón en el que un día fuiste feliz.
Bien, yo he cerrado los ojos muy , muy fuerte, y he inhalado cada átomo de ese paraíso recordado, el viento ha traido los sonidos del ayer, azotando mi memoria, tornando el llanto en paz, tornando el hoy en ayer.
Mis rodillas han recordado el contacto con el terruño, con el amor de una generación, de mis ancestros y su pasión, se me ha antojado tierno el áspero sarmiento, y sus hojas han besado mi rostro, mi desamparado cuerpo ha encontrado paz.
He levantado la vista, y mi sueño estaba allí, y mi recuerdo, construido en mi mente, se alzaba ante mis ojos, mi sueño era real, mi recuerdo era real, era mi herencia, mi rincón y mi recreo.
Dicen que es una suerte tener tu espacio, tu sitio, saber dónde acudir en los malos momentos, como decíamos cuando eramos pequeños/as, “¡¡Casa!!”. Pues mi “casa” es la vid, mi hogar es la vid, no conozco ningún viticultor que no sienta lo mismo al contemplarla, al acudir día tras días para ver su evolución, como crece .
Hoy, nos muestra el fruto, hoy, nos muestra la primera flor. Cerrad los ojos ¿acaso no sería éste vuestro rincón?
Fuente imagen :Bierzo enoturismo
ME GUSTA LA SUTILIZA CON LA QUE EVOCA EL AMOR A UNA DE LAS TRADICIONES MAS CERCANAS Y ENTRAÑABLES DE NUESTRA COMARCA BIERZO, LUGAR ENVIDIABLE POR LA CALIDAD DE SUS CALDOS, NUEVAMENTE PREMIADOS EL CERTAMEN