Ical El Consejo Regulador de la Ribera del Duero tiene previsto poner en marcha un protocolo de toma de muestras para pruebas PCR a los temporeros como medida de prevención ante el COVID-19 durante la campaña de vendimia de este año. De esta manera, y según anunció la propia DO a través de un comunicado, se suma a la iniciativa de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, que ha impulsado esta medida en la Comunidad, a pesar de que se trata de una labor que “no entra dentro de las competencias específicas del Consejo Regulador”.
Sin embargo, el órgano de gobierno ha decidido “implicarse activamente” en esta campaña de control ante la “excepcionalidad” de la situación y así ayudar también a los socios del Consejo, que será el encargado de la coordinación de la realización de las pruebas PCR a los vendimiadores que se encuentren trabajando fuera de la zona básica de salud en la que residen.
Las muestras realizadas se entregarán a la administración regional para que sean analizadas en el Laboratorio de Sanidad Animal en Villaquilambre (León). La empresa contratada para la toma de muestras será también la que comunicará a los implicados el resultado de la prueba y, por lo tanto, informará de las medidas a tomar en el caso de que proceda.
La toma de las muestras dará comienzo en las fechas “inmediatamente anteriores” al inicio de la vendimia y está previsto que se lleve a cabo en Peñafiel, Aranda de Duero y San Esteban de Gormaz aunque no será de forma homogénea ya que “se irá adaptando a la evolución y necesidades de la vendimia”.
“Por prevención y por responsabilidad la Denominación de Origen insiste a sus viticultores y bodegueros en la necesidad de que se sumen a esta campaña de prevención y control. Tenemos en nuestras manos evitar convertirnos en un escenario crítico, sabemos la complejidad que tiene esta cosecha, por eso ponemos todos los medios al alcance de los implicados. Ya hemos vivido situaciones extremas en los últimos meses, y solo ese gesto, solo con un correo electrónico, podemos controlar la expansión del virus y contribuir a que esta sea una vendimia tranquila”, señaló el director general de Ribera del Duero, Miguel Sanz.