Ical El presidente de Asaja Castilla y León, Donaciano Dujo, consideró esta semana que la Ribera del Duero y las otras diez denominaciones de origen de Castilla y León no tendrán problemas a la hora de contratar a temporeros por parte de los viticultores pero sí auguró un problema con la venta del vino, vinculada al cierre de la hostelería durante el confinamiento y a su baja actividad posterior.
En este sentido, señaló que hay muchas bodegas en la Comunidad que tienen mucho vino sin vender y añadió que la cosecha se prevé buena pero las expectativas de la hostelería no acompañan por lo que es previsible que se produzca una caída de precios.
“En Rueda están amenazando con no coger las uva. Por ello, yo pido a la bodegas para que hagan el máximo esfuerzo porque cuando lo han vendido y tenían mercado el vino valía una barbaridad hay han estado los viticultores para producir. Hay que apechugar y a los viticultores no se les puede dejar tirados”, dijo.
Asimismo, aseguró que los titulares de la explotación son los primeros interesados en que los temporeros tengan todas las medidas higiénico sanitarias precisas, ya que de ello depende la recolección de la vid, y añadió que junto con UGT y CCOO se instó a la Consejería de Empleo, a través el Ecyl, sirva de intermediario a la hora de contratar a los temporeros por parte de cooperativa y empresas.
Dujo exigió que “no se estigmatice al sector del vino, ya que los viticultores quiere recoger la uva y dar trabajo”, y si los temporeros se contagian por actividades externas al trabajo no tienen culpa alguna.
Asimismo, señaló que los viticultores no tienen porqué dar casa a los temporeros de la zona, y agregó que las administraciones son las que tienen que poner los medios posibles para dar respuesta en caso de que se produzca algún brote en alguna explotación.
El responsable de la organización agraria en la Comunidad participó en la Asamblea de Asaja General Soria y denunció, además, la caída de los precios a mínimos “incompresibles”, dado que el precio de los alimentos ha aumentado un 30 por ciento, una situación, dijo, “insostenible” para los agricultores.
En este aspecto, señaló que ya en enero se denunció que a los agricultores se les pagaba el cereal como hace 30 años, y agregó que es irrisorio que la cebada se pague en la actualidad a 145 euros la tonelada.
En este sentido, también hizo un llamamiento al Gobierno para que aplique la Ley de Cadena Alimentaria y no permita vender por debajo de los costes de producción, y matizó que es necesario obligar a la industria a etiquetar la procedencia del girasol, ya que algunos llegan sin control sanitario desde “el mar negro”.
En este sentido, exigió evitar la competencia “desleal” de países que producen y exportan sin controles de calidad.
Dujo recordó que Asaja exigió a la Junta que pusiera en funcionamiento una orden para que exista la venta directa de los productores agrícolas y ganadores, ya que evitaría que haya intermediarios que se quedan con el margen del beneficio.
En la Asamblea General se abordó la problemática de las plagas animales y vegetales. Al respecto, Dujo recomendó la “quema controlada de los rastrojos” a partir de una fecha concreta ya que “es más beneficioso para el campo que acabar con las plagas con tratamientos más perjudiciales”.
El presidente de Asaja en Castilla y León también se refirió a la problemática de los animales salvajes que provocan “accidentes, transmiten enfermedades a los ganados y daños a la agricultura”, y apuntó que el pasado año se registraron más de 10.000 accidentes en las carreteras de la Comunidad por animales de caza.