Soledad Aller.El alma busca refugio en algún razonamiento que nuestro corazón ampare, no queremos lágrimas que no sean de felicidad, ni queremos sueños que no podamos alcanzar, escondemos nuestros miedos en imposibles o improbables, cuando la verdadera razón de cada sueño inalcanzados es, simplemente, no haberlo intentado, no haber puesto alma y corazón en cada meta propuesta y dictaminada por la razón.
Cuando a un viticultor le llega este momento, principios de Julio, el sueño está tan cerca de sus manos, tan cerca de la familia en una vid , alrededor de una mesa llamada unión. Existen tradiciones y culturas que nos recuerdan quienes somos, miramos a nuestro alrededor y vemos : amigos, familia y vino…al fin y al cabo la trilogía de la felicidad son.
Lo único que nos queda en estos momentos será quitar un determinado número de frutos de cada cepa para garantizar así una cosecha de alta calidad. Este procedimiento se realiza sobre todo con las variedades de uva tinta para aumentar de este modo la concentración de color, y se conoce como “aclareo” o “vendimia verde”.
En la fase en que la uva envera, las bayas de las variedades blancas comienzar a volverse más transparente , y , cómo no, las tintas comienzan a tomar color. Éste es el momento en que finaliza el crecimiento de los pámpanos y en el que todo el metabolismo se orienta hacia las uvas.
Todo por un sueño, todo un metabolismo centrado en un sueño, alma, razón y corazón por ese sueño ¡¡¡La uva!!!.