Mientras que el consumo de vino cae en muchos países, Suecia experimenta el fenómeno contrario. A finales de 1970, el consumo de vino superó por primera vez –en volumen- la ingesta de licores. Desde entonces, es evidente que dicha bebida se ha convertido en la favorita de los consumidores suecos.
Hoy en día, en el país nórdico se consume un total de 30 litros de vino por persona al año, según los datos de WOW News y la organización STAD, entidad que trabaja para la prevención de problemas con el alcohol y las drogas en el marco del Centro de Investigación de Psiquiatría en Estocolmo.
Según Mats Ramstedt, director de STAD, “aunque el consumo ha sido estable durante los últimos años, el aumento ha sido espectacular a partir de 1996”. El Centro de Investigaciones Sociales sobre el Alcohol y las Drogas (SoRAD) subraya que Sytembolaget -el monopolio estatal de tiendas de licores en Suecia- ostenta una cuota de mercado del 62% en la venta de alcohol. La importación, el segmento HoReCa y el contrabando son los otros canales predominantes. Pero en el caso específico del vino, el monopolio cuenta con un 81% de cuota de mercado mientras que un 8,5% procede de la importación.
Ramstedt apunta que «el consumo de vino por persona era de 18 litros en 1996, antes de que el país entrara en la Unión Europea. Desde entonces hasta hoy, se ha producido un incremento del 65%».
Artículo: www.winesfromspain.com
