Ical La bodega berciana Dominio de Tares celebra su 20 aniversario con la salida al mercado de un nuevo vino que mezcla uvas tintas y blancas de viñedos viejos, bautizado como El Paisano de Tares. La imagen de la etiqueta, en la que el caricaturista Gogue dibuja a un joven que bebe en porrón, vincula tradición y modernidad, como metáfora de las dos décadas de actividad de esta empresa establecida en tierras bercianas en el año 2000.
En ese sentido, el lanzamiento del nuevo vino refuerza la apuesta de la bodega por posicionar los vinos de calidad del Bierzo en lo más alto, con una creación que, según los responsables de la empresa, es un “homenaje a todos los paisanos del Bierzo que con su trabajo han contribuido al crecimiento de esta célebre comarca”. Al respecto, El Paisano de Tares se elabora de acuerdo con la manera tradicional de la comarca, con la mezcla de todas las uvas de la finca, tintas y blancas, y con crianza en viejos cubetos de roble.
Según el enólogo de la bodega, Rafael Somonte, el nuevo vino es “un tinto con alma de blanco, actual y desenfadado”, que marida a la perfección con cualquier ocasión. “Más que un vino, es una forma de ver la vida”, subrayó Somonte. Con una producción de 3.000 botellas, la nueva referencia comercial de Dominio de Tares se suma a otras marcas ya consolidadas como el blanco La Sonrisa de Tares o los tintos Baltos, Cepas Viejas, Bembibre y P3.