Bodegas Pittacum destina a exportaciones en torno a un 40% de las ventas de Pittacum Barrica, Petit Pittacum, Pittacum Aurea y la Prohibición, elaborado con Garnacha Tintorera procedente de cepas centenarias. China, Canadá, Reino Unido y Austria son sus mercados más significativos en el exterior. El Grupo Terras Gauda inició, desde las Rías Baixas, su proceso de diversificación geográfica en 2003 en la D.O. Bierzo con Bodegas Pittacum, prosiguió la expansión territorial en La Ribera del Duero con Quinta Sardonia en 2010 y lo ha culminado en la DO La Rioja con la Compañía de Vinos Heraclio Alfaro.
Las señas de identidad de la bodega de Arganza han perdurado en estas casi dos décadas desde su incorporación al proyecto de Terras Gauda: la autenticidad y el marcado carácter que le imprime la variedad Mencía, que se cultiva en 220 parcelas repartidas en cuarenta hectáreas de viñedos viejos, en el cinturón montañoso berciano.
El grupo bodeguero afronta los desafíos actuales consolidado en estas cuatro zonas vitivinícolas de referencia en España y con mayor renombre internacional. En su conjunto, comercializa cerca de dos millones y medio de botellas y está presente en 60 mercados internacionales.
Pittacum, integrada en Terras Gauda
La facturación del grupo ascendió a 13,8 millones de euros en 2020, un 12,5% menos que el ejercicio anterior, en el que había alcanzado los 15,8 millones. En cuanto al Ebitda, se ha situado en 1,3 millones (1,9 en 2019). El resultado de explotación ha sido de 0,7 millones y, después de impuestos, de 0,37 millones.
El nivel de exportaciones global alcanza el 26%, con Estados Unidos, Reino Unido, Noruega y China como referentes en el exterior. Con Estados Unidos como uno de los mercados más significativos, el acuerdo sellado con Trinchero Family Estates, la segunda bodega familiar más grande del mundo y uno de los distribuidores de referencia, ha supuesto un espaldarazo importante para el posicionamiento de sus vinos en las cadenas de distribución, tiendas especializadas y restauración en el país norteamericano.
Más de tres décadas de trayectoria con José María Fonseca Moretón, socio fundador de Terras Gauda, como presidente, con una filosofía que permanece inalterable: crear vinos de marcada singularidad, ligados al terruño y en los que se identifica el origen. Ha sido el eje sobre el que ha girado su proceso de diversificación geográfica, con una estrategia basada en la diferenciación, la sostenibilidad y la internacionalización. En esta nueva era, la saga familiar continúa con Antón Fonseca Fernández, como vicepresidente, y Carmen Fonseca Fernández, consejera.