Soledad Aller.Notó como una lágrima surcaba su envejecido rostro, tenía 82 años y cien mil cicatrices en el corazón.

Acercó sus encallecidas manos al rugoso tallo, acariciando lo que a él se le antojaba una razón para vivir, casi, casi, la única. Simuló su rostro una sonrisa burlona al ver como los últimos tractores salían del camino que bordeaba la viña, sabía que esa visión no se repetiría muchas más veces. Se reincorporó con una agilidad inusitada, y recorrió el camino a su casa con la tranquilidad que otorga la experiencia

“ Va a ser una gran cosecha” me dijo mi abuelo mientras nos alejábamos.

La familia nos esperaba para comer, siempre ha sido una fiesta en mi casa estas fechas, mi abuelo nos lo inculcó. Para él era tan importante el vino en la mesa, como toda la familia unida. No permitáis nunca que nadie os venda nada más sobre esta cultura, es muy difícil ponerle precio a una cultura que has “mamado” desde niña, los recuerdos no tienen precio, él siempre me decía “ que nunca falte el vino en la mesa, si no hay comida, se calienta”.

Puede que os suene peculiar su comentario, pero sólo quiero que entendáis vagamente la pasión que empujaba a mi abuelo a seguir año tras año robándole un tesoro los dioses, arrancando una sonrisa juguetona a sus comensales y , dándonos una lección a todos/as. ¿¡cuál fue la lección?!

Al igual que en la vendimia, tras el “despalillado, estrujado,sulfitado y encubado” sale un maravilloso vino que alegra los corazones, del mismo modo, en esta vida, por mucho que se tuerzan nuestros caminos, y muchas zancadillas que nos pongan podemos sacar algo bueno, algo positivo y seguir vendimiando.

 

 

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3 comentarios en «Lecciones»

  1. Qué mezcla de sentimientos… Me ha encantado este post, creoq ue todxs los que hemos «mamado» la vendimia desde niñxs nos sentimos identificados…
    Gracias Soledad, por devolverme tan buenos recuerdos y sensaciones…

  2. Brillante lección de una costumbre de la que muchos participamos desde pequeños sin comprenderlo hasta alcanzar cierta madurez,igual que el vino.

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